HISTORIA
Actualmente se conserva, en el repositorio de la Royal Society de Londres, el único telescopio existente que fue construido por Isaac Newton, al menos en parte. Un instrumento con una historia complicada que vamos a intentar dilucidar. En libros, revistas e internet se ven muchas imágenes del «primer telescopio de Newton”. Podemos afirmar con una base científica bastante sólida que esta frase es falsa. Sabemos que Isaac Newton construyó y/o participó en la elaboración de varios telescopios y que son tres los que tienen una autoría históricamente comprobada:
1. Un primer telescopio construido en 1668 que sólo mostró a algunos amigos en Cambridge y del que no se conserva ninguna parte física. A pesar de la pobre y confusa información existente, y a juzgar por algún manuscrito o dibujo (Fig.1), todo indica que este telescopio era muy básico, de óptica mediocre y mecánicamente indomable, con molestas vibraciones y un sistema de enfoque muy limitado que desalineaba el tren óptico con excesiva facilidad. El espejo principal habría sido de 1.3 pulgadas* de diámetro y unas 6 pulgadas de distancias focal y el secundario habría sido plano. Todos los espejos eran de speculum metal (ver sección «Speculum» para información detallada). El conjunto trabajaba cercano a los 40 aumentos mediante un ocular que consistía, probablemente, en una lente simple plano-convexa colocada en el lateral del tubo.
Parece ser que Newton no quedó contento con este prototipo. De todos modos consideró su desempeño como comparable al de un refractor de 3 o 4 pies de la época ya que observó la esfera de Júpiter con sus 4 lunas y la fase de Venus.
* Nota importante: el propio Isaac Newton nos dice que solía diafragmar sus telescopios con un círculo ubicado entre el ocular y el ojo, para mitigar las aberraciones. Esto limitaba su apertura efectiva. Curiosamente, sus espejos de 2 pulgadas se convertían a 1.3 pulgadas después de esta modificación. Todo ello, nos hace dudar del diámetro real de sus espejos. Leyendo sus manuscritos y ahondando en algunas contradicciones históricas, no tenemos claro si siempre se distinguía entre la apertura real y la efectiva.
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2. Un segundo telescopio construido en otoño de 1671 del que llegaron noticias a la Royal Society (R.S) y que fue enviado a esta institución, en diciembre de 1671, para ser revisado. Parece ser que todo el mundo quedó impresionado, lo que supuso la elección de Newton como miembro y que el telescopio pasara a cuidado de la R.S. hasta que se le perdió la pista en 1731. De este telescopio disponemos de bastante información en forma de descripciones de la R.S, publicaciones en Philosophical Transactions y correspondencia personal de Newton y de sus allegados. La descripción formal en latín que realizó en 1672 Henry Oldenburg (secretario de la R.S) está acompañada por la ilustración que se muestra en la Fig.2. La mejora más destacada fue el uso de una bola de madera a modo de montura acimutal.
Este segundo modelo tenía un espejo primario de 2 pulgadas (seguramente, en ocasiones diafragmado) y una distancia focal de 6 1/4 pulgadas (158mm), de nueva manufactura y más grueso que el del prototipo de 1668. El ocular, como en el primer telescopio, era también una lente simple plano-convexa que se colocaba en un agujero del tamaño de «un gran alfiler» ubicado en un lateral del tubo. En este modelo se mejoró el sistema de enfoque con un tornillo prisionero que desplazaba el espejo primario arriba y abajo sin rotar el eje óptico. Posteriormente, en Philosophical Transactions y en Opticks, aparecen variantes de este telescopio, por lo que no se conoce exactamente cuál era su aspecto real ni se conserva tampoco, casi con total certeza, ninguna parte física del mismo.
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3. Newton-Wickins telescope: un tercer telescopio concebido entre 1671-1672 y construido conjuntamente con John Wickins, amigo de Newton y compañero de cámara en el Trinity College de Cambridge. Se cree que este fue el instrumento de mejor calidad y estuvo con Newton, como mínimo, hasta la década de 1690. Sus características ópticas eran iguales al anterior, con un speculum primario de 2 pulgadas de diámetro, una distancia focal de 6 1/4 pulgadas y un secundario plano. Cabe decir que Newton testeó, en algún momento, un prisma en lugar del típico secundario plano, con bastantes buenos resultados, pero parece que la idea no prosperó.
La historia de este tercer telescopio es complicada y no es fácil seguir su pista. Desafortunadamente, la información es escasa, confusa, y poco definitiva, especialmente referente a sus restauraciones. Sin embargo, y haciendo un laborioso ejercicio de síntesis, podemos decir a modo de resumen que:
– Por algunas citas, es posible que este telescopio estuviera en manos de Edmund Halley, amigo de Newton, ya que además reaparece en escena después de su muerte.
– Hay evidencias bastante claras de una restauración durante el siglo XVIII por los anticuarios Heath & Wings, pero no sabemos a ciencia cierta el alcance de esta reatauración. Podría ser incluso que se realizaran varias y no sólo por ellos. Lo que sabemos a ciencia cierta es que después de este periodo fue devuelto en 1766 por Thomas Heath a la Royal Society.
– Todo apunta a que el Newton-Wickins sería el telescopio más antiguo que se conserva de Newton y el que actualmente está en el repositorio de la Royal Society de Londres -el que aparece en muchos lugares erróneamente como el primer telescopio. Nos basamos para tales afirmaciones en que no ha sobrevivido nada del primer telescopio de 1668, y que sepamos tampoco del segundo presentado en 1671 a la RS. Sin embargo, en base a la literatura histórico-científica analizada, es muy factible que algunas partes del tercer telescopio Newton-Wickins sobreviviera mínimo 70 años después de la década de 1690, cuando el telescopio aun estaba con Newton.
– Respecto al telescopio que se conserva actualmente en la RS, podemos aventurar que al menos el tubo, los espejos (repulidos y refigurados) y la base pueden ser originales y pertenecer al tercer telescopio. Y que el portaocular, las barras metálicas y la distancia focal son implementaciones del siglo XVIII.
– Los 3 telescopios atribuidos a Newton tenían características muy similares (dimensiones, diámetro, distancia focal, aumentos…) y las variaciones más significativas eran en la composición del speculum metal.
– El telescopio que hemos construido, es una réplica lo más exacta posible de este tercer instrumento, que sepamos, hasta la fecha, el reflector más antiguo que existe en nuestro planeta.